El Observatorio de las Ocupaciones del SEPE ha publicado la edición 2022 del INFORME DEL Mercado de Trabajo Estatal.
Dicho informe recoge los datos del año 2021. Además de ofrecer un informe general, también se publican informes específicos por colectivos especiales: mujeres, jóvenes, personas mayores de 45 años, personas con discapacidad o extranjeros.
La información que ofrece va desde los principales datos económicos, poblacionales y laborales, hasta la movilidad de los trabajadores o la información de los beneficiarios de prestaciones, yendo de lo general (sectores o actividades), a lo más específico (las ocupaciones). Además, tiene siempre en cuenta los diferentes ámbitos de comparación.
El informe ofrece datos que indican que los principales indicadores confirman que 2021 ha sido un año de recuperación del empelo y de la actividad económica. Destaca también que el descenso de la tasa del paro bajó al 13,33%, por debajo del nivel pre pandemia y un 20% menos de parados registrados.
Por lo que hace a los ocupados y afiliados, los valores también han incrementado ligeramente por encima de los valores de 2019. Esto se ha visto gracias a actividades económicas como las actividades deportivas, recreativas y de entretenimiento; los servicios de alojamiento; los servicios de comidas y bebidas; las actividades de creación, artísticas y espectáculos; la programación; la consultoría y otras actividades relacionadas con la informática.
En cuanto a las ocupaciones, la distribución de contratos y solicitudes de empelo siguen concentradas en dos grandes grupos ocupacionales: el de las ocupaciones elementales y el de los trabajadores de los servicios de restauración, personales,protección y vendedores. Estos dos grupos suman más del 70% de la contratación y casi el 59% de las solicitudes de empleo.
El informe también facilita datos sobre las actividades que destacan por sus buenas perspectivas de empleo. Se trata de las actividades de construcción, especialmente en la rehabilitación; servicios sociales debido al envejecimiento de la población; actividades relacionadas con la economía circular, la industria química y farmacéutica; la industria alimentaria; los servicios a las empresas, así como la investigación y el desarrollo; el comercio electrónico, la logística el transporte de mercancías y el almacenamiento.
Por último, según datos del informe, la recuperación de la actividad económica y laboral se enfrenta a la carencia de mano de obra cualificada para cubrir las necesidades empresariales de personal, sobre todo en el ámbito de la industria, la construcción y, de forma transversal, en ocupaciones y competencias vinculadas a la digitalización.
La carencia de mano de obra cualificada hace necesario potenciar la cualificación en todos los sectores y ocupaciones, ya sea en los más innovadores como en aquellos más tradicionales y que generan mayor volumen de empleo.
Las principales carencias formativas y que afectan a todos los sectores recaen en los idiomas, la digitalización y la sostenibilidad, y las competencias blandas (la comunicación oral y escrita, el trabajo en equipo, orientación a resultados, adaptabilidad, liderazgo, etc.).
En conclusión, hay que seguir apostando por la formación dual, no solo en la formación profesional, sino también en la universitaria, y sobre todo potencias la interacción universidad-empresa.
FUENTE: ADADE CENTRAL