El Gobierno ha establecido una reforma significativa en el permiso de lactancia, aprobado por el Consejo de Ministros, que ahora permite a los trabajadores con hijos recién nacidos o adoptados ausentarse por hasta 28 días consecutivos, con remuneración completa.
Esta medida puede aplicarse en una sola etapa o dividirse en dos períodos de 14 días, ofreciendo así flexibilidad y adaptabilidad. Esta iniciativa busca generalizar una práctica ya presente en muchos convenios colectivos, con el objetivo de mejorar la conciliación laboral y familiar, especialmente para aquellos trabajadores que no están amparados por la negociación colectiva.
El permiso de lactancia, oficialmente conocido como ‘permiso para el cuidado del hijo lactante’, es un derecho estipulado en el Estatuto de los Trabajadores. Desde 2019, se extendió explícitamente tanto a padres como a madres, siguiendo varias sentencias judiciales favorables. Este permiso permite a los empleados ausentarse de su trabajo, sin afectar su salario, durante una hora diaria para cuidar de su hijo recién nacido, adoptado o acogido.
Los trabajadores pueden ejercer este derecho hasta que el menor cumpla nueve meses, o doce meses si ambos progenitores trabajan en la misma empresa. Generalmente, este permiso se toma tras el permiso por nacimiento o adopción, que tiene una duración máxima de 16 semanas.
La reforma busca resolver la ineficiencia organizativa que puede generar la ausencia diaria de una hora en el trabajo, algo que ya se contemplaba en varios convenios colectivos. Ahora, con la nueva normativa, todos los trabajadores, independientemente de si su convenio lo contempla o no, podrán acumular estas horas para disfrutar de hasta 28 días seguidos de permiso en un año.
Este permiso es remunerado completamente y es responsabilidad de la empresa cubrirlo, garantizando al trabajador su salario habitual durante el período de ausencia.
FUENTE ADADE CENTRAL